Verso, hotel urbano en la cima de Valparaíso
Una con terraza de lujo, buena gastronomía y coctelería, además de una interesante carta de vinos, es lo que ofrece esta propuesta ubicada en el cerro Florida.
En las alturas de Valparaíso, en el cerro Florida, se encuentra Verso, un hotel urbano con un año y medio de vida -inaugurado a fines de 2015-, que busca transmitir y revivir la genialidad de muchos poetas iberoamericanos. Por eso, las murallas del recinto están decoradas con fragmentos de escritos de Mario Benedetti, Nicanor Parra, Gabriela Mistral y, por supuesto, Pablo Neruda, una especie de vecino, considerando que La Sebastiana, una de sus casas, está a unos cuentos metros.
Verso, es un alojamiento pequeño, aunque en verdad parece más grande, dado que es parte de un proyecto inmobiliario adyacente que sigue su misma estética. Lo que sí, sus dependencias contemplan dos lofts, independientes ubicados a un costado del inmueble, enfocados en grupos de amigos, de cuatro a cinco personas, o familias; y 19 habitaciones: una suite, dos premium, y el resto doble estándar, de las cuales seis tienen vista a la calle.
Todas están dedicadas a un vate distinto y cuentan con una decoración bastante sencilla acorde a su espacio, dado que es reducido, al estilo neoyorkino. En el caso de las estándars, poseen sólo un Box Spring, bastante cómodo gracias a sus almohadas de pluma y sus sábanas de 200 hilos; dos veladores; un estante; y un baño completamente fragmentado, con la ducha, wc y lavamanos independientes. A esto se añade un reducido balcón. Dentro de los servicios, está una SmarTv con cuenta de Netflix y wifi en todo el recinto. También hay buenos amenities, amigables con el medio ambiente.
Por lo mismo, el concepto está pensado en un público joven, parejas o extranjeros con algo de experiencia en viajes. Hasta el momento, la mitad de su público es nacional y gran parte de ellos son santiaguinos que buscan escapar un fin de semana de la capital.
Dentro de sus particularidades está su diseño moderno – urbano y su ubicación, dado que colinda con un barrio turístico, liderado por La Sebastiana, que a la vez es residencial, siendo bastante tranquilo, pues se encuentra a un costado de los Carabineros. A la lista se suma que posee una vista inigualable desde donde se puede apreciar Valparaíso en 180 grados, captando desde el puerto hasta los cerros, con sus coloridas y particulares casas.
En esa increíble terraza se encuentra su restaurante y bar, pero también un espacio para estar y dos Hotub con vista al mar. Este servicio, con un costo aparte, no sólo puede brindar un momento de relajo, sino también ser ideal para una ocasión romántica, dado que acá se puede disfrutar, luego de firmar un consentimiento, de un cocktail de cortesía, haciendo este panorama aún más placentero.
::Gastronomía y Cocteleía::
El restaurante y la terraza cuentan con una gran vista, por lo que es un lugar genial para admirar el puerto. Lo bueno, es que este servicio de igual manera está disponible para quienes no están alojandos en el hotel.
La carta ha sido desarrollada por el chef César Sierra, quien hace unos meses comenzó a trabajar en esta propuesta gastronómica que denota técnica, ingenio, respeto por el producto y mucho sabor. Un ejemplo es su entretenido y diferente Tártaro de res con emulsión de cebollines, mostaza en grano, alcaparras, pepino dulce, polvo y aceite de perejil, cubierto con mote crocante y flores de la estación: o su tremendo plato consistente en la pesca del día que va con salsa de albahaca, gnocchi de betarraga y camote, perejil, choritos, vegetales y flores.
Los pasajeros tienen acceso en estas dependencias a un completo y sabroso desayuno buffett, el que está disponible hasta las 11 horas. También está la opción de pedirlo a la habitación, sin costo, pero, claramente, las alternativas son más acotadas que al disfrutarlo en la terraza, donde hay croissant, pain au chocolat, tostadas, huevos, palta, yogur, frutos secos, entre otras delicias.
La coctelería también está interesante y bien lograda, pues contempla creaciones de autor desarrolladas por Cristián Soto y Daniel Cueto, ambos bartenders de Valparaíso. Una muestra de esto es Mega, un cocktail fresco y elegante elaborado con syrup de almendras, St. Germain, té de Jamaica y vodka. Sin embargo, la carta obviamente no deja fuera los clásicos, destilados, cervezas y elaboraciones sin alcohol.
::Conclusión::
Verso es un hotel pequeño, por lo que sus habitaciones estándars pueden sorprender por su acotado espacio y, por ende, poca privacidad en relación al baño, pero a la vez, es todo lo que se necesita si lo que se quiere es estar todo el día recorriendo el puerto. En esto contribuyen sus espacios comunes, dado que el recinto tiene un rooftop, patio interior a cielo abierto y una pequeña sala de estar.
Su aura es acogedora, siendo un especial atractivo los fragmentos que rescatan a diversos poetas iberoamericanos.
Algunos de sus plus son la vista, su gastronomía y coctelería. Si se va por un fin de semana de relajo, disfrutar en el hotub es, prácticamente, una obligación.
TXT: Loreto Oda Marín
Verso, es un alojamiento pequeño, aunque en verdad parece más grande, dado que es parte de un proyecto inmobiliario adyacente que sigue su misma estética. Lo que sí, sus dependencias contemplan dos lofts, independientes ubicados a un costado del inmueble, enfocados en grupos de amigos, de cuatro a cinco personas, o familias; y 19 habitaciones: una suite, dos premium, y el resto doble estándar, de las cuales seis tienen vista a la calle.
Todas están dedicadas a un vate distinto y cuentan con una decoración bastante sencilla acorde a su espacio, dado que es reducido, al estilo neoyorkino. En el caso de las estándars, poseen sólo un Box Spring, bastante cómodo gracias a sus almohadas de pluma y sus sábanas de 200 hilos; dos veladores; un estante; y un baño completamente fragmentado, con la ducha, wc y lavamanos independientes. A esto se añade un reducido balcón. Dentro de los servicios, está una SmarTv con cuenta de Netflix y wifi en todo el recinto. También hay buenos amenities, amigables con el medio ambiente.
Por lo mismo, el concepto está pensado en un público joven, parejas o extranjeros con algo de experiencia en viajes. Hasta el momento, la mitad de su público es nacional y gran parte de ellos son santiaguinos que buscan escapar un fin de semana de la capital.
Dentro de sus particularidades está su diseño moderno – urbano y su ubicación, dado que colinda con un barrio turístico, liderado por La Sebastiana, que a la vez es residencial, siendo bastante tranquilo, pues se encuentra a un costado de los Carabineros. A la lista se suma que posee una vista inigualable desde donde se puede apreciar Valparaíso en 180 grados, captando desde el puerto hasta los cerros, con sus coloridas y particulares casas.
En esa increíble terraza se encuentra su restaurante y bar, pero también un espacio para estar y dos Hotub con vista al mar. Este servicio, con un costo aparte, no sólo puede brindar un momento de relajo, sino también ser ideal para una ocasión romántica, dado que acá se puede disfrutar, luego de firmar un consentimiento, de un cocktail de cortesía, haciendo este panorama aún más placentero.
::Gastronomía y Cocteleía::
El restaurante y la terraza cuentan con una gran vista, por lo que es un lugar genial para admirar el puerto. Lo bueno, es que este servicio de igual manera está disponible para quienes no están alojandos en el hotel.
La carta ha sido desarrollada por el chef César Sierra, quien hace unos meses comenzó a trabajar en esta propuesta gastronómica que denota técnica, ingenio, respeto por el producto y mucho sabor. Un ejemplo es su entretenido y diferente Tártaro de res con emulsión de cebollines, mostaza en grano, alcaparras, pepino dulce, polvo y aceite de perejil, cubierto con mote crocante y flores de la estación: o su tremendo plato consistente en la pesca del día que va con salsa de albahaca, gnocchi de betarraga y camote, perejil, choritos, vegetales y flores.
Los pasajeros tienen acceso en estas dependencias a un completo y sabroso desayuno buffett, el que está disponible hasta las 11 horas. También está la opción de pedirlo a la habitación, sin costo, pero, claramente, las alternativas son más acotadas que al disfrutarlo en la terraza, donde hay croissant, pain au chocolat, tostadas, huevos, palta, yogur, frutos secos, entre otras delicias.
La coctelería también está interesante y bien lograda, pues contempla creaciones de autor desarrolladas por Cristián Soto y Daniel Cueto, ambos bartenders de Valparaíso. Una muestra de esto es Mega, un cocktail fresco y elegante elaborado con syrup de almendras, St. Germain, té de Jamaica y vodka. Sin embargo, la carta obviamente no deja fuera los clásicos, destilados, cervezas y elaboraciones sin alcohol.
::Conclusión::
Verso es un hotel pequeño, por lo que sus habitaciones estándars pueden sorprender por su acotado espacio y, por ende, poca privacidad en relación al baño, pero a la vez, es todo lo que se necesita si lo que se quiere es estar todo el día recorriendo el puerto. En esto contribuyen sus espacios comunes, dado que el recinto tiene un rooftop, patio interior a cielo abierto y una pequeña sala de estar.
Su aura es acogedora, siendo un especial atractivo los fragmentos que rescatan a diversos poetas iberoamericanos.
Algunos de sus plus son la vista, su gastronomía y coctelería. Si se va por un fin de semana de relajo, disfrutar en el hotub es, prácticamente, una obligación.
TXT: Loreto Oda Marín
